De las crónicas para nadie.

Ver para arriba.
A veces me doy cuenta que estoy en el nudo, mejor no darle más vueltas, el nudo se hace más insondable.

Por suerte nadie lee esto

10 meses. Bueno, digamos 8.

Se puede ir dejando pedacitos de uno, probablemente usted no se de cuenta de eso. Si piensa que lo que escribo es cursi, tiene razón, no puedo ofrecer nada mejor.
Es un día ¡che! luego vuelvo, o no, no se, hoy pongo en duda lo seguro.
Si, me está gustando ser cursi, me gusta, es más relajado, no tengo que preocuparme por borrar palabras que no me gusten.
Puedo hasta escribir y recomenzar el texto: "Se puede ir dejando pedacitos del corazón en otros, problablemente uno no se de cuenta, pero cuando deje de estar tan ocupado va a poder verlos a la distancia. No es tan grave, claro, el músculo se regenera y guarda en la memoria sus fragmentos esparcidos. El problema es el acceso a la memora, si es eso, el acceso.
Si hasta en los momentos en que uno (yo) dice (digo) -voy a estar en contacto más íntimo conmigo.....- bla bla bla bla.
¿Qué hacer entonces?

Pez: ROMPEVIENTOS

La memoria es un galpón
y en el momento menos pensado, ahí estoy
puro hocico, todo lomo, todo sorbo y toda voz
me saco punta, viruta . . . me afilo, me afino
y al compás que trepa la puntería:
bocasucias, buscapiés,
rompevientos
mi sólo pozo donde bajo y soy carnada
paciencia elástica en el trigo flaco de mi agua
y cada hombre es una piedra
que camina hacia la arena.


Serrat: una vieja canción (fragmento)

...Y te manda a la lona
de un gancho al corazón
una vieja canción
pasada de moda,

que a tu pesar invoca
los besos del ayer
y los vuelve a poner
en tu boca